EL ESPANTAPÁJAROS

Sus ojos de colores he encontrado

y casi una mirada con sentido,

un poco tambaleante, malherido,

el niño a su muñeco ha acomodado.

Sus ojos buscan ese vuelo alado

que mira de reojo el colorido

lo asusta ese sombrero tan hundido

y busca el cielo gris, anubarrado.

Las lluvias, las tormentas, el aguanta,

no se achica y enfrenta a un bravo cuervo

que busca el reposo de su brazo.

Se acerca la bandada… y ya no espanta,

lo ha vencido ese destino acerbo,

muñeco y aves… jugando en el ocaso…